Una coreografía es una manera de organizar y ordenar movimientos corporales secuenciales. Las coreografías se pueden utilizar en muchos ámbitos, en este caso nos vamos a centrar en la danza para recopilar los pasos necesarios para crear una:
Seleccionar un ritmo musical. Permite centrar el ritmo e incluso los pasos que se usará.
Elige la canción. Siempre se intenta buscar una canción que transmita el mensaje que pretendemos.
Crea los primeros pasos. En esta fase es recomendable dejar al cuerpo expresarse sin un propósito concreto.
Anota los pasos. Es importante apuntar los pasos que se han hecho para evitar que se nos olviden.
Graba la coreografía. Sirve para comprobar si realmente se están ejecutando los pasos que seleccionados y comprobar si las sensaciones cuando se ejecuta son las correctas.
Practicar. Es importante repetir la coreografía para perfeccionar los movimientos.